Nadie se decepciona de la religión, pero sí de la Iglesia

Primero debemos separar que es una cosa y otra, Iglesia: conjunto de fieles que siguen la religión establecida por Jesucristo; Iglesia católica: conjunto formado por el clero y los fieles de una religión cristiana en una época o una zona geográfica determinada. Gobierno eclesiástico: está formado por el Papa y la jerarquía católica.
Y ahora la definición de Religión: Conjunto de dogmas, normas y prácticas relativas a una divinidad: Cada una de las diferentes doctrinas según dichas creencias, ahora en cristiano: básicamente la Iglesia son los curas o sacerdotes que manejan los diferentes sacramentos y las iglesias y las limosnas y la religión son los textos y las enseñanzas que de ahí emanan y son aceptados por los que creen en esa religión.
Esto viene a colación por la visita del Papa Francisco a la República Mexicana en donde en sus homilías, primero regañó a los obispos porque seguramente alguna información tiene, no solo de las grillas que se manejan muy en lo oscurito dentro de la Iglesia, sino de que los fieles ya no sostienen a la Iglesia y están migrando a las otras religiones, o a sectas que has salido de la misma Iglesia, aceptando solo algunas partes de los evangelios o creando algunos a su entera conveniencia.
Y luego el papa Francisco clamó contra los corruptos y ricos que se adueñan de la riqueza de otros, según dijo en una misa en Ecatepec, municipio en el que miles de personas sufren pobreza y marginación y después enumerando las tres tentaciones que degradan al cristiano (riqueza, vanidad y orgullo), el Pontífice destacó que la inclinación de buscar la riqueza a toda costa, despoja a los más marginados, «quiero invitarlos nuevamente hoy a estar en primera línea, a primerear en todas las iniciativas que ayuden a hacer de esta bendita tierra mexicana una tierra de oportunidad», afirmó en su ángelus dominical.
En esta línea, auguró que México no sea una tierra donde es necesario emigrar por falta de oportunidades laborales, que no haya necesidad de emigrar para soñar; donde no haya necesidad de ser explotado para trabajar; donde no haya necesidad de hacer de la desesperación y la pobreza de muchos el oportunismo de unos pocos, además el papa Francisco clamó ayer contra los corruptos y ricos que se adueñan de la riqueza de otros, según dijo en una misa en Ecatepec, municipio en el que miles de personas sufren pauperización y marginación.
El Papa invitó a estar en primera línea para que el país sea una tierra de oportunidades y no caiga en manos de traficantes de muerte, según dijo en su Ángelus dominical frente a más de 300 mil personas, quiero invitarlos nuevamente hoy a estar en primera línea, a primerear en todas las iniciativas que ayuden a hacer de esta bendita tierra mexicana una tierra de oportunidad, afirmó el Pontífice durante la misa dominical en el predio El Caracol, en esta línea, auguró que México no sea una tierra donde es necesario emigrar por falta de oportunidades laborales, qué en México no haya necesidad de emigrar para soñar; donde no haya necesidad de ser explotado para trabajar; donde no haya necesidad de hacer de la desesperación y la pobreza de muchos el oportunismo de unos pocos, una tierra que no tenga que llorar a hombres y mujeres, a jóvenes y niños que terminan destruidos en las manos de los traficantes de la muerte, metérselo bien en la cabeza, con el demonio no se dialoga, no se puede dialogar porque siempre va a ganar.
Pero a los Obispos les dijo en un lenguaje muy cuidado algunas verdades como las siguientes. No le tengan miedo a la transparencia, la Iglesia no necesita de la oscuridad para trabajar. Vigilen para que sus miradas no se cubran de las penumbras de la niebla de la mundanidad.»
«No se dejen corromper por el materialismo trivial ni por las ilusiones seductoras de los acuerdos debajo de la mesa; no pongan su confianza en los «carros y caballos» de los faraones actuales, porque nuestra fuerza es la «columna de fuego» que rompe dividiendo en dos las marejadas del mar, sin hacer grande rumor.
«Les ruego por favor no minusvalorar el desafío ético y anticívico que el narcotráfico representa para la juventud y para la entera sociedad mexicana, comprendida la Iglesia.»
La proporción del fenómeno (narcotráfico), la complejidad de sus causas, la inmensidad de su extensión, como metástasis que devora, la gravedad de la violencia que disgrega y sus trastornadas conexiones, no nos consienten a nosotros, refugiarnos en condenas genéricas, sino que exigen un coraje profético y un serio y cualificado proyecto pastoral.
«Sólo comenzando por las familias, acercándonos y abrazando la periferia humana y existencial de los territorios desolados de nuestras ciudades, involucrando a las comunidades parroquiales, las escuelas, las instituciones comunitarias, las comunidades políticas, las estructuras de seguridad, sólo así se podrá liberar totalmente de las aguas en las cuales lamentablemente se ahogan tantas vidas, sea la vida de quien muere como víctima, sea la de quien delante de Dios tendrá siempre las manos manchadas de sangre, aunque tenga los bolsillos llenos de dinero sórdido y la conciencia anestesiada»
El Protagonista de la historia de salvación es el mendigo.
Si tienen que pelearse, peléense, si tienen que decirse cosas, se las digan, pero como hombres, en la cara…
No se necesitan «príncipes», sino una comunidad de testigos del Señor. Sentenció el Papa Francisco.