General Cepeda, Coah., 22 de junio 2020.- En un hecho insólito, el alcalde Juan Gilberto Salas Aguirre estuvo a punto de ser secuestrado por su policía municipal y, tras librarse del ataque, ordenó disolver la corporación policiaca y solicitó el apoyo de la Policía Estatal de Coahuila y la Guardia Nacional para dar seguridad a los habitantes que gobierna.
De acuerdo con el edil, este 22 de junio, alrededor de las 16:00 horas, varios elementos de la policía municipal de General Cepeda intentaron subirlo por la fuerza a una camioneta de reciente modelo, sin embargo, como pudo, logró ponerse a buen resguardo y solicitó la intervención de la Policía Estatal de Coahuila.
Ya más tranquilo, decidió interponer una denuncia contra los malos elementos de seguridad y, de paso, disolvió el cuerpo de seguridad municipal por considerar que son un peligro para la población.
En auxilio al alcalde, acudieron elementos de seguridad de la Fiscalía General del Estado y de la Guardia Nacional.
ALCALDE HABRÍA ARMADO TODO UN SHOW
Por otro lado, hasta la redacción de El Demócrata llegó información relacionada con el caso en donde se semana que 10 de los 13 elementos de seguridad municipales interceptaron al alcalde Juan Salas en un intento de diálogo a lo que éste se negó.
Ahí se hicieron de palabras e inclusive hubo algunos forcejeos pero dejaron que el edil se marchara. Este llegó a protegerse en alguna casa y de allí llamo a la Guardia Nacional y a la Policía Estatal ante quienes denunció el intento de secuestro.
Hasta ahora se sabe que los policías están molestos por el cambio de la delegada y que el alcalde decidió cesarlos ante lo que llamó un intento de secuestro.
La delegada interina Blanca Gallegos renunció a su cargo poco después de conocerse los hechos.
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