Piedras Negras, Coah., 7 de junio.- Un hombre no soportó la idea de vivir alejado de su mujer, con la que vivió por 17 años, y a golpes de talache acabó con su vida, luego, sin pensarlo mucho, se arrancó la vida colgándose de la escalera de su casa.
Los hechos sucedieron en casa marcada con el número 103 de la calle Nezahualcóyotl, casi en el cruce de la calle Centenario de la Colonia Bravo de Piedras Negras.
María Guadalupe Compiguo Oranday, de 43 años de edad se encontraba trabajando su turno en la fábrica BRENAMEX y hasta ahí llegó su marido, Benjamín Espinoza López, de 44 años, quien con engaños la sacó del lugar y la llevó al domicilio donde se presentaron los trágicos acontecimientos.
La pareja tenía días separada y eso no pudo soportarlo el marido quien, tras reclamar airadamente que lo hubiera dejado, en un arranque de celos tomó un talache y golpeó en repetidas ocasiones la cabeza de sus mujer hasta arrancarle la vida.
Posteriormente, cuando se dio cuenta del crimen que había cometido, de que había asesinado a la mujer de su vida, Benjamín tomó un cordón, lo ató a una viga de la vivienda y se suicidó. Ahí quedó colgado, casi encima del cuerpo de María.
Julián López Cedillo, padre de la occisa, explicó que su hija llevaba 17 años de vida matrimonial con Benjamín Espinoza López y jamás supo que tuvieran algún problema, hasta hace 4 días que tuvieron una discusión que no tenía gran importancia.
Ahora, después de este crimen y suicidio, tres menores de edad quedan en la orfandad, ellos tienen 10, 13 y 16 años de edad. El inspector de PRONNIF, Erasmo Rodríguez dijo que ya buscan a familiares de los pequeños para que se hagan cargo de ellos, además aseguró que les brindará atención psicológica a fin de que superen los lamentables sucesos.
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