Escribe: Carlos Robledo.-
Parras, Coah., 04 abril 2020.- Hay un dicho que versa “un desesperado va por todas” y esto sin duda le ocurrió al alcalde de Parras de la Fuente, Ramiro Pérez Arciniega, quien en su afán por buscar una medida para seguir saqueando a los parrenses, adquirió, a precios desorbitados, iglús para utilizarlos como accesos a los edificios públicos, y prevenir con ello la propagación del COVID-19.
Sin embargo, los artefactos adquiridos por el alcalde parrense son de FABRICACIÓN CASERA y en un principio fueron utilizados por la alcaldesa de Escobedo, Nuevo León, quien a su vez se los compró a un regidor de su ayuntamiento, encargado de su fabricación.
Estos iglús en los Estados Unidos, fueron rechazados por no contar con las medidas de seguridad establecidas por la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA), de aquel país, pues las carpas originales tienen un alto costo y son utilizadas al interior de los hogares y de edificios públicos.
Pero, como en Parras todos es permitido, uno de estos iglús será instalado en la plaza de armas y será utilizado como un túnel sanitizante para que los empleados de la presidencia municipal atraviesen por su interior y les sea rociado una solución para evitar contagios del Covid-19, poniendo en alto riesgo su salud al utilizar químicos que no sean adecuados para este fin.
Además de acuerdo a información vertida por medios informativos de Monterrey, estos iglús ya fueron desinflados por el municipio de Escobedo, al ver que los resultados de su labor desinfectante no fueron los apropiados tras dos semanas de uso.
Sin duda esta será una estafa más del alcalde Ramiro Pérez al pueblo de Parras, al engañar con un supuesto túnel sanitizante a la población, y hacer creer que con eso se estará evitando la propagación del virus SARS COV 2, causante del coronavirus, Covid-19.
Quien también se suma a esta estafa sanitaria es el alcalde de Monclova, Alfredo Paredes, quien anunció la adquisición de 20 túneles que serán distribuidos en diferentes puntos de la ciudad, para evitar que la población se infecte con el virus, pero que juega al igual que el alcalde Pérez, con la salud de los ciudadanos
Es increíble en pleno siglo XXI, se sigan adquiriendo artefactos de FABRICACIÓN CASERA para tratar de mitigar los efectos de una pandemia mundial que pone en alto riesgo la vida de las personas y no sea tomada en serio por unas autoridades que con una labor deleznable, ruin, vil, deshonesta, desleal y sin escrúpulos, intentan salvar la vida de unos, poniendo en riesgo la de otros.
Desgraciadamente, Parras sufre de falta de pavimentación, alumbrado público, seguridad, recolección de basura, entre otros servicios, además de estar abandonado por las autoridades municipales, y el recurso utilizados para adquirir estos artefactos inservibles, bien pudieron ayudar a cambiar un poco la realidad de esta ciudad.
Quien en su sano juicio le va a dar me gusta al comentario? Esos servidores mal llamados servidores, más bien oportunistas de 3a, no tienen ética ni vergüenza. Lo único que hacen es ganarse el repudio de la gente.