¿Quién dijo que el gobernador no se encargaba de la seguridad?
Saltillo, Coah., 28 de Mayo.- Cuando Rubén Moreira dijo su frase histórica (histórica por inútil, inoperante y mentirosa) “De la seguridad me encargo yo”, sus más cercanos colaboradores decidieron hacer propio tal mensaje al grado que, desde que inició la actual administración, gozan de los beneficios que da el poder público y, para demostrar que sí hay seguridad en Coahuila mantienen vigilancia permanente en sus domicilios, amén de la seguridad que cargan a todos lados.
Este es el caso de María Esther Monsiváis, funcionaria de las más beneficiadas con el “Proyecto Moreira”, quien no se conforma con llevar a su lado, con vehículos blindados, una nube de guaruras, de contar con vigilancia permanente en su residencia de San Alberto sino que además se da el lujo de ordenar que se mantenga estrecha vigilancia en su antiguo domicilio localizado entre las calles Jiloca y Caspe 205, de la colonia Residencial Portal de Aragón, de Saltillo.
Lo increíble del caso es que ya no habita en ese domicilio que cuenta con seguridad del gobierno, ordenada por la Procuraduría General de Justicia del Estado, para las 24 horas del día por más de 8 años.
Es toda una fortaleza que nadie habita, María Esther Monsiváis mandó instalar, en esta casa que habitó hace años, cámaras de seguridad de circuito cerrado y con alambrado eléctrico de alta tensión en la barda, además de contar con la vigilancia de elementos de la PGJE que a bordo de una patrulla del gobierno custodian celosamente la propiedad.
Este tipo de abusos los cometen la mayoría de los funcionarios “de primer nivel” del gobernador Rubén Moreira mientras en poblaciones como Torreón y Monclova la iseguridad cabalga en sus calles y esto provoca que la gente viva con temor de ser víctima de la inseguridad.
¿No habrá una unidad policiaca de “élite” y dos elementos para cada ciudadano?
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