*** Ella sabe muy bien que debe palotear las de harina una noche antes, de perdido me hubiera puesto un atún con galletas”
Monclova, Coah., 13 de mayo 2018.- “Te vas a arrepentir… No te la vas a acabar”, fue el mensaje que… dejó en la ventana cuando regresó del trabajo y no encontró a su mujer.
Furioso arrojó algunos objetos al suelo, los bañó de gasolina y les prendió fuego. Su casa, ubicada en el Mezquital del Valle, ardió por dentro pero eso ni siquiera inmutó al incendiario quien señaló a su mujer como la culpable de todo lo que ocurría en su domicilio.
Y fue entonces cuando se desahogó con los policías que lo detuvieron. Vivía una situación insoportable, su mujer se negaba a “palotear las de harina” para ponerle el lonche.
“No es justo que esta cabrona me eche lonche con tortillas de maíz… fui la burla de todos en el jale”, decía a los uniformados.
Ya se lo había dicho, que se iba a arrepentir si le volvía a poner tortillas de maíz en su vianda. Y ese medio día al abrir su envoltorio de comida para calentar “las de yeso” volvió a toparse con unas horripilantes tortillas de maíz.
Sus compañeros de trabajo se burlaron de él mientras disfrutaban de unas deliciosas tortillas de harina. Juan decidió no comer y no tocó los alimentos que le puso su mujer.
Las horas que faltaron para la salida del trabajo sirvieron para enardecer más al molesto marido quien decidió entonces la forma de vengarse.
Apenas llegó a su casa, escribió el letrero, lo pegó en la ventana y prendió lumbre a los muebles. La vivienda fue arrasada por las lenguas de fuego hasta dejar todo convertido en cenizas.
“¿Por qué tenía que pasar esto? Ella sabe muy bien que debe palotear las de harina una noche antes, de perdido me hubiera puesto un atún con galletas”, explicó mientras lo llevaban a los separos de la comandancia.
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