fbpx

La exquisita crueldad del IEC

BAILE Y COCHINO…

Por Horacio Cárdenas

Todos conocemos una madre, una tía, una hermana así: ¿Qué prefieres, el pan Bimbo solo y duro, o una rebanada de pastel de chocolate, ese que es tu favorito?, y allá va el babotas de uno a contestar con la saliva cayéndosele de los labios, una rebanada grande de pastel de chocolate, por favorcito.

Pues en ese momento la mamá, la tiíta, la hermanita del alma se acuerda: ah no, pero es que tienes picado el diente, ah no, es que el doctor dijo que tienes que bajar de peso, ah no es que si no te cuidas desde chiquito puedes desarrollar diabetes como el baquetón de tu padre que ya hasta medio pie le tuvieron que mochar, además de que: fíjate lo que dice aquí la envoltura del pan Bimbo, que está adicionado con vitaminas y minerales, no ‘mana, prefiero el pastel, mira que está hecho con leche, no mamá el de chocolate es mi pastel favorito, no, pero es que lo estamos guardando para las visitas.

Cuando uno es chico, pues nomás pone cara de que lo engañaron las personas que más dicen que lo quieren, o suelta a llorar, con lo que encima le dicen que es un poco hombre por andar de chilletas.

Ya cuando es uno un poco mayor, con algo de malicia de por cómo lo ha tratado la vida, ya no cae tan fácil en la trampa, que por supuesto le siguen tendiendo las señoras con la misma amabilidad y gentileza: ¿Qué prefieres, el pan Bimbo o la rebanada de pastel?, y uno de cínico pregunta ¿para qué me preguntas, si no me vas a dar pastel y me va a decir que el pan Bimbo es el mejor alimento para los niños y jóvenes en crecimiento?, en ese momento pasa de ser uno el niñito consentido en el infeliz escuincle malagradecido, que hace sufrir a las mujeres que tanto lo adoran, que se desviven por él, que le ofrecen su postre favorito, y es así como les paga.

¿Le suena? A lo mejor lo ha vivido en carne propia, a lo mejor solo lo ha visto de lejos o lo sabe de oídas, si este último es su caso, agradezca que no ha vivido en ese infierno de tentaciones… negadas por la gente que más lo quiere, porque mujeres tendrás muchas, pero…

Pues bien, aunque parezca que no viene al caso, este es precisamente lo que está ocurriendo en el Instituto Electoral de Coahuila con el asunto de la reelección de los presidentes municipales. ¿quiere m’hijo ser alcalde por un año?, sí,  sí quiero ‘má, pues ándele… ¿quiere m´hijito reelegirse de alcalde, ahora que la ley lo permite?, sí, sí quiero amá, pues ándele, para que vea cómo lo quiero, condenadote… ¿quiere el niñito consentido reelegirse de alcalde por segunda vez, ya ve lo engolosinado que está con el puestote que le consiguió su mamacita que tanto lo adora?, sí mamita linda, sí quiero… pues ah que caray, pues fíjese que no se puede…

Es entonces cuando los presidentes municipales en funciones ponen el grito en el cielo, y no solo eso, sino que contratan los mejores abogados en el tema electoral que el dinero puede comprar en todo México, no solo en Coahuila, y ahora sí, a meter pleito.

¿De quién es la culpa de que Coahuila esté viviendo momentos de inestabilidad política en el nivel de las presidencias municipales por el tema de la reelección sucesiva?, pues de la mamá, de la hermana, de la tía metiche, del Instituto Electoral de Coahuila, que allí anda desde hace años calentándoles la cabeza a los alcaldes de que sí podían reelegirse consecutivamente por segunda vez, para salir al final con que no, que no se puede.
De por sí que esto ha sido un desbarajuste desde el principio. La revolución mexicana ocurrió bajo el precepto de Sufragio Efectivo, No Reelección, principio que duró durante décadas, garantizando aquel otro principio de la democracia a la mexicana, uno de los más importantes, si no el que más: el que ya bailó, que se siente.
Ah no, pero como no hay político que no sea ambicioso y que no se sienta la virgen envuelta en huevo, durante las mismas décadas que estuvo vigente el precepto de no reelección inmediata, se la pasaron picando piedra de sus cimientos para tumbarlo.

No ha habido presidente de la República, gobernador, alcalde, regidor, diputado, que no haya soñado con repetir… y repetir… y repetir… y quedarse en el hueso eternamente, con una salvedad claro, la de escalar a una posición todavía más elevada, y en esa sí quedarse… y repetir… y repetir…
Las autoridades electorales son, o deberían ser el primer estanco de contención de las ambiciones y de los embates de los políticos para eternizarse en el hueso, pero como la mamá o la tía de la historia de ficción que le contamos al principio, andan allí calentándoles la cabeza, para luego dejarles ir el baldazo de agua helada, con todo y hielos, para ver si de una vez se descalabra el idiota escuincle.

Hace cuatro años, más o menos, que salieron con la vacilada de las alcaldías de un año, dizque para empatar el calendario municipal coahuilense con quien sabe qué otro calendario, era para que allí mismo, juntándolos a todos los candidatos de todos los partidos para cada uno de los municipios en la entidad les hubiera leído la cartilla: pero entiendan de una vez, el que quiera ser alcalde de un año, ni sueñe con que puede reelegirse para un segundo período.

Oiga maestra, pero la ley dice que sí se puede, a ver trae acá tú baboso, ah sí, a ley dice que ahora sí se pueden reelegir de manera consecutiva.

Bueno, obvio sin pedir disculpas porque ¿qué madre, esposa, tía, hermana jamás ha pedido disculpas de nada?, les hubiera leído la cartilla: a ver, métanse en la cabezota que sí se pueden reelegir de manera inmediata, ¡¡¡Pero solo una vez!!! ¿¿¿entendido tú, animal???, ah no, allí los tiene a los ocho alcaldes que están en posición de aspirar a una segunda reelección, con la vista perdida, soñando en que si se podrá no si no se podrá.

Por supuesto no faltan los atrabancados, uno de Sabinas y otro de Monclova, que hasta a los tribunales electorales han llevado el asunto de la mamá, perdón del IEC y la reelección, y el tribunal no sabe qué hacer con la papá caliente, y como no puede ser de otra manera, se lo regresa al conciliábulo de  la mamá, la hermana y la tía, quienes nada contentas que las haya ido a poner en vergüenza  a la casa de la vecina, pues para pronto le dicen que no, está prohibido lo del pastel de chocolate porque te hace daño, y está prohibida la reelección consecutiva porque es antidemocrática ¿entonces por qué cuernos no les dijeron eso hace cuatro años, hace tres años, hace dos años?
Allí tiene a los alcaldes atrabancados gastando dinero a ver si pueden hincarle el diente al pastel, otros más azorrillados, están a la expectativa de a ver cómo les va a los otros, para ya con precedente, declarar su amor por el pastel de chocolate y el hueso que han disfrutado por largas dos administraciones, y tanto que ya se les hizo vicio.

No por nada el IEC es una dama, una dama jija de su pin pon… y no lo digo yo, lo dicen los alcaldes.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Powered by WordPress.com.

Up ↑

Descubre más desde El Demócrata

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo