Religión y política, una mezcla que mata
** No es cuestión de libertad de prensa
** Derechos Humanos; chiflando en la loma
La matazón de caricaturistas en Paris es hija del fanatismo y la intolerancia religiosa. Sin justificar a nadie, esa lamentable tragedia humana es contexto para hacer una reflexión sobre lo peligroso que resulta la mezcla de temas religiosos con intereses políticos y de dominación de una cultura sobre otra.
La ceguera religiosa y la intolerancia ha las ideas diferentes, son dos limitaciones humanas que la sociedad no ha podido superar al grado deseable, a pesar de los asombrosos avances científicos universales y el despertar a una conciencia superior de algunos sectores de la comunidad mundial.
En lo personal subrayo, que soy respetuoso de todas las religiones, de todas las sectas emanadas de ellas, y de cualquier otro concepto que alguien tenga sobre esa entidad que la mayoría reconoce como Dios. Es mi respeto también para quienes se declaran ateos.
Con más de 40 años de estudiar los fundamentos de las religiones y sectas conocidas, me golpea la sospecha de que ni los más brillantes teólogos, ni los más reconocidos filósofos, ni los más conocedores de las escrituras sagradas de las religiones troncales, podrán conciliar el poder político con el poder religioso.
Expuesta esta tesis, es tiempo de reforzar la advertencia de que la matazón en Francia se debe al exceso contra el profeta central del Islam, y no por ridiculizar a los políticos gobernantes de los pueblos islámicos. Porque sin excepción, a toda persona religiosa le ofende en su individualidad espiritual que ridiculicen a su Dios.
Si bien las caricaturas ofensiva no justifica asesinatos; igual las diferencias religiosas no justifican el irrespeto y la sátira excesiva a la persona trascedente que todos los humanos tenemos en nuestro interior mental y emocional. Por lo tanto, no es cuestión de libertad de prensa, el fondo es la falta de consciencia del respeto a nuestros semejantes. Sin ofender a nadie, es bueno reconocer que Dios no tiene dueño.
Derechos Humanos;
chiflando en la loma
Reciclando la misma mezcla de cinismo y falsas promesas, EPN lanzó su mensaje a la nación como una preparación para la regañada que recibió del presidente Obama en la reciente visita al vecino país.
El mensaje presidencial, minimiza el tema de los 43 Ayotzinapa y los fusilados por el ejército en Tlatlaya, además borró de la atención nacional los 300 desparecidos en Allende Coahuila donde hay muchas cosas que aclarar de parte de Rubén Moreira Valdez, quien entregando botes con “tierrita” a las víctimas quiere sepultar ese crimen de lesa humanidad en el cementerio del olvido.
Por eso es muy importante que José Miguel Vivanco, director de la División de las Américas de Human Rights Watch, haya anticipado una carta al presidente de EE UU, metiendo el tema de los derechos humanos en la agenda de EPN con Obama en dicha reunión bilateral.
Resulta indignante y vergonzoso para los mexicanos, que sea un organismo internacional quien mande esa carta y no el Comisionado de los Derechos Humanos, en México Luis Raúl González Pérez.
Ni que decir de la inutilidad del defensor de los derechos humanos en Coahuila, Dr. Xavier Diez de Urdanivia, que se la pasa chiflando en la loma antes de hacer su chamba para que todo se aclare en el caso de los 300 desparecidos en Allende Coahuila.
Con esos defensores de los derechos fundamentales, los mexicanos no necesitamos al crimen organizado para seguir siendo asesinados o desaparecidos.
Aguillón olvida el “moreira
saqueo” de 35 mil millones.
Ya se inició el proceso de selección de candidatos del PRI para las diputaciones federales, en el que se exigirá a los aspirantes cartas credenciales que avalen su forma honesta de vivir para evitar “abarcazos”, reveló el dirigente estatal del PRI, David Aguillón.
Con el clásico cinismo tricolor, el regordete David Aguillón cacique del PRI en Coahuila, no quiere “abarcazos” en sus candidatos a las diputaciones federales, pero olvida el escandaloso “Moreira saqueo” que su partido hizo a Coahuila en tiempos de Humberto Moreira Valdés que busca regresar a la política luego de fabricar una megadeuda de más de 35 mil millones de pesos.
En términos políticos y efectos electorales, esa megadeuda es un robo consumado por el PRI, porque priístas fueron todos los involucrados, desde Humberto Moreira, hasta Jorge Torres López, también exgobernador y ahora prófugo por ratero.
Asimismo, no dudo que en el PRI haya personas honestas y confiables, pero puedo afirmar que nadie de esos ciudadanos probos quieran ser diputados federales para defender a rateros públicos consumados. Así de sencillo
Así las cosas y el cochinero priísta, Aguillón y su pandilla de rateros enfrentan comicios en las peores condiciones; no tiene confiabilidad y credibilidad. Y esto no lo digo yo, reto a David Aguillón que camine por cualquier parte y pregunte qué opinan los ciudadanos de su partido y de la megadeuda. Como respuesta recibirá unas cuantas mentadas de madre cuando bien le vaya.
Por eso resulta una total pendejada decir que en el Partido Revolucionario Institucional no quiere “abarcazos” cuando su partido como pandilla gobernante, tiene pendiente además, aclarar los 300 desparecidos en Allende. Porque la tierrita que se le entregó en botecitos a unas cuantas familias enlutadas, no basta para guardar ese expediente en el cajón de la indolencia y la complicidad.
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