Torreón, Coah., 17 de septiembre.- Mientras un aspirante a gobernador, el del PRI, festejaba su cumpleaños con bombo y platillo en un lugar selecto de esta ciudad, otro, el del PAN, mantuvo reuniones de trabajo con campesinos de distintos ejidos de la comarca lagunera de Coahuila quienes les expusieron sus necesidades y carencias.
Así mientras se presentaron dos situaciones contrarias, por un lado, Miguel Ángel Riquelme anunció ante cientos de priístas, convocados expresamente a “festejar su onomástico”, y habló de su futuro triunfo electoral, aun cuando no tiene la seguridad de ser el candidato del PRI, por el otro, Isidro López Villarreal mostró, a los ojos de los ejidatarios que acudieron a su llamado, los programas de atención al campo que se realizan en Saltillo y que han permitido mejorar la calidad de vida de este sector.
Las dos caras opuestas relucieron hoy, una en la gran reunión de priístas donde Riquelme Solís festejó por adelantado su triunfo electoral y a unos cuantos kilómetros de distancia del pachangón, el alcalde de Saltillo conoció de viva voz las inquietudes y problemas que enfrentan los campesinos laguneros, –de los ejidos El Tejabán, Santo Tomás y Santa Ana del Pilar, en Matamoros, además de otros ejidos de San Pedro y Francisco I. Madero– quienes abordaron el tema de alternancia y democracia como un anhelo que en el 2017 se convertirá en realidad.
Isidro López visitó el ejido tejaban es de Viesca, así como el ejido Santo Tomás y Santa Ana del Pilar en Matamoros, además de otros ejidos de Francisco I Madero y San Pedro.
De esta forma, el 17 de septiembre es fecha en donde empiezan a tomar forma las aspiraciones de los dos contendientes más fuertes para lograr el triunfo electoral en el 2017: Miguel Riquelme, del PRI e Isidro López Villarreal, del PAN.
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