¡Que alguien se apiade de nosotros!, claman ciudadanos de Ocampo

*** “Policías Acreditables” hacen de las suyas, saquean el municipio.-

*** El alcalde Alfonso Pecina calla ante el temor a sufrir represalias.-

Ocampo. Coah.- Habitantes de este municipio viven una de sus más grandes pesadillas con la presencia de elementos de la “Policía Acreditable” que están cometiendo cuanto abuso y fechoría pueden en perjuicio de las familias.

La pequeña población ha sido blanco de los “Acreditables” que lo mismo cobran por “no traer el cinturón de seguridad” que por circular sin una placa o por no traer permisos para transportar alguna cosa u animal en sus vehículos. Igual sucede por el hecho de realizar reuniones familiares o fiestas. “Por todo nos exigen dinero”.

Los inconformes, cuya identidad se reserva El Demócrata ante el temor que han expuesto en el sentido de ser objeto de represalias, aseguraron que ya se han reunido con el alcalde Alfonso Pecina pero que éste vive también con la preocupación de ser objeto de algún atentado y no hace nada por ayudar a la comunidad.

Los denunciantes, que aseguraron presentarán un pliego petitorio a la Secretaría de Gobernación y a la Presidencia de la República para que detengan tanto acto de rapiña y abuso de autoridad, dijeron que en un principio se creyó que con la llegada del Mando Único mejoraría aun más la seguridad y la tranquilidad pero todo ocurrió al contrario: “ellos sembraron el pánico, nosotros tenemos el miedo.”

“Porque en nuestro pueblo todos nos conocemos y nos exigen el cinturón, es un pueblito no una ciudad y en nuestros ejidos pasa lo mismo cuando existen solo algunas familias también quieren que porten cinturón. Pues estamos en el rancho como decimos aquí. Ahora no nos hacemos fuera de la razón porque la ley a si lo exige pero que no La frieguen en este pueblito”.

Aclararon que las fechorías que cometen los acreditables en contra de las familias de Ocampo las realizan inclusive en estado de ebriedad. “Invaden nuestras propiedades cuando realizamos alguna fiesta o reunión, detienen gente, cobran “derechos de piso” y nadie hace nada por ayudarnos.

Lamentaron que mientras el gobernador Rubén Moreira hable en su informe que la seguridad es una prioridad de su gobierno, sean sus propios policías los que siembren el terror entre la comunidad abusando del cargo y la protección que tienen de las autoridades estatales.